241. Dionisio Gutiérrez: La primavera y nuestra misión en la vida

Abril 10, 2023
FacebookMessengerWhatsappTwitterShare
Editorial del programa 234 de Razón de Estado

Editorial del programa Razón de Estado número 241


 

En marzo y abril de cada año, en el hemisferio norte, recibimos la primavera, que coincide con Semana Santa, y con los días en que escuelas y colegios dan un pequeño descanso.

Habrá notado usted que, en el mundo de hoy, en el que la política, el clima, la economía, la tecnología, la salud y las relaciones personales, nos tienen de cabeza, dedicamos más tiempo a preguntarnos cómo encontrar soluciones a los problemas del diario vivir; cómo descubrir alternativas prácticas para avanzar en un continente en el que el populismo, la corrupción, la mediocridad, el conflicto, el egoísmo, la desinformación, la mentira, la represión y la violencia dominan cada día más la vida de nuestros países.

Si la inteligencia artificial trae respuestas y soluciones a estos dilemas, bienvenida sea. Sobre todo, porque en los últimos procesos electorales en América Latina, los pueblos, en su mayoría, aunque son un fracaso, votaron por opciones de izquierda populista, pues fue la forma en que los ciudadanos manifestaron su rechazo y descontento con un mundo que cada día se entiende menos.

Las expectativas de la gente están muy por arriba de la realidad. Casi todos los políticos ofrecen lo que saben que no cumplirán, y los pueblos votan por ellos, aunque sepan que les mienten. 

La política de hoy responde poco, la ausencia de liderazgo es evidente, y los pueblos no encuentran luz para apagar la oscuridad.     

Así, vivimos en un mundo peligroso, lleno de contradicciones, en el que la volatilidad y la incertidumbre son la norma, donde cada día más, nadie cree en nadie, reina el sálvese quien pueda y todos contra todos.

Esto no es cuestión de optimismo o pesimismo. Es cuestión de datos. Solo hay que ver la cantidad de naciones gobernadas hoy por delincuentes y autócratas; y sus élites de paseo.  

Las oportunidades y las buenas noticias que deseamos vendrán de nuestra capacidad para aprender a ser ciudadanos libres y comprender el cambio de era en el que estamos. Evolucionar. Agrandar el espíritu, y encontrar paz y alegría en la tormenta, nos abrirá espacios de luz y esperanza.   

El reto es encontrar información veraz, oportunidades, y buenos consejos en este complejo tablero de ajedrez que nos toca vivir.

Toca ahora, después del descanso, regresar a lo que debe ser nuestra misión de vida: exigir integridad en la política, demandar racionalidad económica a los gobiernos; y comprometernos todos, en practicar más la decencia humana.

 

FacebookMessengerWhatsappTwitterShare